Mi sentir y mi asentir en el día de hoy, como consciencia agua.
Soy vuestra Madre Agua , o como vosotros le decís: Luz liquida en movimiento, en limpieza, en exacerbación de todo aquello que ha quedado a través de los tiempos asentido en el planeta.
Las tierras que ahora conocéis no han sido siempre como vosotros las miráis, ellas contienen cantidades de sucesos, muchos de ellos sangrientos, muchos de ellos en dolor y en sufrimiento, y ese dolor, ese sufrimiento, igual que todo lo que está sucediendo en el planeta en este momento para la ascensión, conlleva un cambio.
Se debe “limpiar” todo aquello que por las experiencias ha sido fraguado en la tierra misma, en las aguas, en todos los seres.
Cada ser, cada elemento, conlleva en sí grandes cambios a través del tiempo de la humanidad y no siempre han sido tiempos de gran amor, muy por el contrario, todos los aprendizajes que ha realizado la humanidad a través del tiempo, han conllevado dolor y sufrimiento.
Grandes tragedias se han dado sobre el planeta, tragedias que muchos seres aun ni siquiera conocen, porque están fuera de su contexto habitual, solo la tierra como tierra puede hablar sobre ello y por ello hoy me uno como madre agua con la tierra misma, porque se lo que está pasando en estos instantes a vuestro alrededor en todo el planeta.
El clima está cambiando, todo obedece a un contexto y a una limpieza, pero ello no es comprendido en su real belleza, todo debe cambiar, todo debe removerse, bajo tierra se encuentran grandes civilizaciones que en un momento dado incluso pueden volver a aparecer, pero todas ellas, antes de reaparecer, deben ser limpiadas con el agua misma en Luz violeta.
La consciencia del Fuego Violeta inundará todas esas perforaciones, todas esas entidades que han quedado sepultadas en el tiempo, y las transformará, por ello se os dice que reaparecerán continentes, pero todo aquello que busque reaparecer para una nueva Tierra, deberá conllevar limpieza y claridad y debe estar transformado, por ello en estos instantes el Fuego Violeta acompaña al agua como Luz liquida penetrando todos los rincones donde es posible transformar, limpiar, sanear, liberar, incluso cuerpos que han quedado sepultados a través de los tiempos.
Los seres humanos solo miran lo que está en el externo, lo que está ante sus ojos físicos, pero sus ojos internos muchas veces no logran captar lo que está bajo sus pies, o en frente vuestro.
Ha habido guerras fratricidas, muchos seres han quedado sepultados en las grandes guerras que en la humanidad se han sostenido y todos esos seres, sus cuerpos, cadáveres, como les decís vosotros deben resurgir para ser limpiados, conformados y restituidos en Luz.
El agua está haciendo esa función en estos momentos, porque lo que vosotros no lográis hacer desde lo que vosotros llamáis conciencia, que yo diría inconciencia, no es suficiente.
Siempre “trabajáis” con aquello que veis y os causa dolor porque lo veis, porque lo asentís desde vuestros ojos físicos, pero son muy pocos los seres que desde su corazón logran captar, todo aquello, todas aquellas voces que han quedado en el pasado sepultadas y que ahora luchan por salir, por liberarse, por ser reencontrados. Muchos cuerpos han quedado en el pasado y aun, en estos días, y en muchos días venideros, quedarán sepultados, por ello el agua logra allegarse hasta donde vosotros no os allegáis, por ello os decía, impregnad el agua, impregnad la lluvia, de Fuego Violeta, para que así el Fuego Violeta haga su labor desde vuestra intencionalidad, desde vuestro compromiso como humanidad, de reencontraros y reencontrar a vuestros hermanos.
Las aguas se revolverán, en cantidad que vosotros no sois capaces de captar, es también ello en gran dolor, pero es necesario hacer una remoción, es necesario liberar todo lo que ha quedado atrapado en desamor, en inconsciencia, en sufrimiento.
Hoy la invitación es a que volváis el agua en Fuego Violeta. Toda el agua que veis como lluvia, convertid vuestros ríos, vuestros mares, el agua que tomáis, convertid vuestras lágrimas, toda el agua que está en vuestro cuerpo en Fuego Violeta, y el Fuego Violeta iniciará su gran salvación, para todo aquello que lo contenga, la transformación es desde el instante.
Son momentos aciagos los que vive la humanidad, y más aún, los que les tocará ver, pero empezad por algún lado, empezad por esto que se os dice, tornad en Fuego Violeta todo aquello que queráis que sea en transformación amorosa, cálida, en amor infinito.
No creáis que como agua no me duele hacer lo que debo hacer, pero no siempre hay aceptación a todo aquello que no conocéis.
Muchos seres decidieron marcharse en esta época, muchísimos y muchísimos incluso lo decidieron desde el agua, ya os daréis cuenta.
Pero también muchos otros sois “responsables” por la ayuda que podéis brindar, si no podéis físico, hacedlo desde vuestro corazón amoroso, desde vuestra mente. Cubrid el planeta mismo, cubrid a madre Tierra en Fuego Violeta en permanencia, que arda el Fuego Violeta por todos los confines de la Tierra, y el Fuego Violeta horadará lugares que han estado inactivos y donde los seres humanos en esta época no habéis podido allegaros. Ella reencontrará todo aquello que necesite ser limpiado, y cuando el agua limpia, penetra toda hendidura por donde sea posible que la Luz liquida penetre, os hablo incluso de vuestros cuerpos forma, por ello muchas cosas habréis de ver, pero asentíos en vosotros como Fuegos Violeta de gran viveza, de gran vibración, imaginaos el planeta mismo ardiendo en Fuego Violeta de compasión, de transformación, y de liberación.
Venid benditos del Padre, porque se os lo ha pedido y vosotros así lo liberareis y lo asentiréis en vosotros, invitad a muchos seres que también lo realicen, y seréis asistidos desde las grandes Ligas de la Luz, y acompañados y enseñados.
Todo es posible si el amor está con vosotros, por ello hoy ésta reunión del agua, la tierra y el amor con vosotros. Sed bendecidos y no creáis que es en castigo como alguna vez se os habló del agua, es limpieza y así debéis irlo asentando en vuestros corazones para que no emanéis tristeza y compasión, emanad una compasión de alegría, por todo aquello que se está limpiando y se está reorganizando para vuestro planeta.
Cada ser ha decidido, o hecho un acuerdo para sustentar experiencias durante la vida que realiza, vosotros acompañadlos en lo que es perfecto para cada uno, porque si todos vosotros os sentís en desaliento, en dolor infinito, quien podrá ayudar a salir a todas aquellas almas a la Luz divina?, buscad vuestro corazón más amoroso, vuestro corazón sagrado, y convertidlo en una tea viva de Luz Violeta y de transformación, y estaréis ayudando a este gran momento humanitario.
Bendecidos sois desde el Fuego Violeta que Yo Soy, desde el agua que Yo Soy, desde la tierra que Yo Soy, desde el Yo Soy que Yo Soy, en unificación con todo lo que es, todo lo que tiene vida y se realiza.
Bendiciones.
Canaliza
Luz Maria Echandía