Este es un momento decisivo. El cambio se acelerará ahora, aún más. Y les decimos esto para que no entren en pánico cuando lo experimenten. Espérenlo. El cambio ya está aquí… el GRAN cambio, y lo primero que notarán es una aceleración.
Lo viejo está comenzando a desaparecer aún más rápido. Las viejas ideas, formas de vida, actitudes, creencias e instituciones se desmoronarán. Se desprenderán tan rápido que les resultará impactante. ¡Pero déjenlo ir! ¡Déjenlo ir! Debe irse para que la Tierra y toda la vida en ella puedan vivir.
Nada de valor se irá. Lo bueno solo se transformará en algo que conducirá a más vida, a una vida mejor. Puede que no lo parezca ahora, pero no mentimos, y te decimos que este desprendimiento debe ocurrir. Deja desprendértelo, déjalo caer al suelo. Y luego déjalo ir.
La vieja energía busca imponerse en estos tiempos de agitación, y verán a algunos intentando controlar los vientos del cambio. Intentan arrastrar la vida de vuelta a los viejos sistemas patriarcales. Quieren aferrarse al poder, controlar la Tierra y toda la vida en ella, por lo que eligen luchar contra el cambio. Pero repetimos, los vientos del cambio no se pueden controlar. Ya no hay vuelta atrás. El movimiento es hacia adelante, solo hacia adelante.
Les instamos a mantenerse alejados de las tormentas que azotan. Que simplifiquen. Hagan lo que les haga sentir bien, digan la verdad y cuídense mutuamente. Vivan nuestro mensaje y amen, pase lo que pase.
No se dejen atrapar por la furia de las tormentas, sino hagan todo el bien posible y mantengan su enfoque en la Red de Luz.
Tienes un papel que desempeñar en estos tiempos de convulsión, y tu parte es mantener la luz firme. Ama y sirve a todos. Sé el faro que eres y haz lo que un faro hace, brilla en medio de la tormenta. Comparte tu luz y sonríe, canta, ama y deja que el mundo te vea. Porque cuando haces esto, logras un gran bien.
Naciste para estos tiempos oscuros y tormentosos. Lo que está sucediendo no es casualidad. Estamos contigo. Te sostenemos firme, sosteniendo la luz firme.
LAS ABUELAS.
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