Una tierra nueva, un nuevo cielo
“La Tierra será afectada por el paso gravitacional de “el Gran Astro X”,
como se le ha denominado en esta escuela, y como ya saben los investigadores
e intuitivos estudiantes.
Esa afectación tendrá consecuencias traumáticas para
la vida humana sobre la Tierra, porque el clima será dramáticamente
alterado, las aguas inundarán millones de hectáreas de tierra firme; ciudades
costeras desaparecerán de la geografía; el eje planetario tendrá un gran
vuelco y los polos serán ecuador, y el ecuador será polos. Todo será removido,
pero la vida no se acabará, sino que seguirá un rumbo prefijado por las Altas
Jerarquías de la Luz Espiritual; por Aquellos que conocen y guían los destinos
evolutivos de los astros.
La Tierra será sacudida desde sus mismas entrañas y “se sacudirá el
polvo” de su atmósfera, así como el perro se sacude el lomo. La Tierra sacudirá
sus entrañas, desde la corteza hacia la superficie atmosférica y así expulsará
‘el veneno astral’ alojado en su materia durante millones de años.
Esta purga astral será ayudada, y más bien producida, por el gran
poder magnético gravitacional del ‘Astro X’, el cual ahora se aproxima a un
ritmo veloz hacia vuestro sistema solar. Cuando llegue el momento crítico del
traspaso, es decir, el momento de la inmersión del Planeta X dentro del sistema
de órbitas planetarias de vuestro sistema solar, “el día se volverá noche”; y
esto debe ser entendido tanto físicamente como simbólicamente; en ambos
sentidos. Ese tiempo será el tiempo del fin de una época racial.
Cuando llegue el momento, nada habrá en la Tierra que quede sin
temblar; el sol se oscurecerá y la luna se pondrá de un azabache rojizo,
semejante a la sangre vieja y seca. Este evento sucederá porque ‘el Gran Astro
X’ se interpondrá con su enorme masa entre la Tierra y el Sol produciendo lo
que en esta escuela hemos denominado ‘ECLIPSE X’: “el eclipse del gran
cambio”; denominado así porque todo podrá entenderse entonces como “un
antes y un después del gran Eclipse X”; ya que ese evento será el gran
reformador del planeta Tierra; será ‘un gran divisor de aguas’, tras lo cual lo
nuevo, llegará.”
De EISA: Escuela Iniciática Solar de las Almas
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