La
naturaleza es la gran maestra, con sus ciclos
nos explica, que nada es estático, que aunque en invierno el frío y
las inclemencias nos mantienen con menos alimentos, y hace la vida mas dura, luego llega la primavera y el mundo recupera sus colores,
sus perfumes. Que todo es cíclico en el cielo y en la tierra.
Cuanto
más duros los inviernos, más bella la primavera, más exultante el
renacimiento. Como lo pueden ser tus malos
momentos
en la vida. A cada uno de tus problemas le corresponde una solución. Tú
eliges permanecer gimiendo como una víctima, o desplegar tu poder para
vencerlos. Atrévete a extender tus alas y desplázate en un mágico vuelo
sobre la densidad humana.
Todo
lo que te rodea tiene una enseñanza, todo lo que ocurre a tu alrededor esta
lleno de lecciones, siempre ayudándote a recordar lo que ya sabes. Observa
desde fuera, desde tu dimensión de luz y sutileza, desde tu alma ajeno a la
densidad.
Observa
el sincronismo de hechos de tu vida, mira hacia atrás y comprenderás las
señales, que te llevaron a determinadas situaciones. Hazlo y con el tiempo
podrás comprender las señales del presente y vislumbrar el destino que te
señalan.
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