Tú, SER único! Diferente de todos los
otros. Sin reserva ni duda, dejo que estés en el mundo, tal como te veo y
te oigo. No tengo para ti ningún pensamiento ni palabra de juicio...
No veo error alguno en las cosas que puedas
decir, ni hacer, sentir y creer porque entiendo que te estás honrando a ti mismo al hacer lo que consideras
verdad para ti.
No
puedo recorrer la vida con tus ojos ni verla a través de tu corazón. No
he estado donde tú has estado ni he experimentado lo que tú has experimentado,
ni he visto la vida desde tu perspectiva única.
Te
aprecio exactamente como te percibo, expresando tu propia y singular chispa de
la Conciencia Infinita, buscando encontrar tu propia forma individual de
relacionarte con el mundo.
Sin
reserva ni duda, te dejo hacer cada elección, para que aprendas de la forma que
te parezca apropiada.
Resulta
vital que descubras y vivas tu propia persona y no alguien que yo u otros
piensen que deberías representar.
En
la medida de mi capacidad, sin denigrarme ni ponerme en un compromiso, te
apoyaré en eso. No puedo saber lo que resulte mejor para ti, lo que debas
considerar verdad o lo que necesitas, porque no sé lo que has elegido aprender,
ni cómo has elegido aprenderlo, con quien o en qué periodo de tiempo.
Solo
tú puedes sentir tu excitación interna y escuchar tu voz interna, yo sólo tengo
la mía.
Reconozco
que, aunque parezcan diferentes entre sí, todas las maneras de percibir y
experimentar las diferentes facetas de nuestro mundo, todas tienen validez.
Sin
reserva ni duda, admito las elecciones que hagas en cada momento. No emito
juicio sobre esto, porque me parece imprescindible que honre tu derecho a tu
evolución individual, porque esto le da poder a ese mismo derecho para mí y
para todos los demás.
Y
si eliges un camino que yo no puedo andar o que no quisiera andar, y aunque
elija yo, no añadir mi poder y mi energía a ese camino, nunca te negaré el Gran
Regalo de Amor que el Gran Espíritu me ha concedido para dárselo a toda la
Creación.
Como
te amo, así me amarán. Así como siembro, así recogeré.
Sin
reserva ni duda, sé que tienes el derecho universal de libre elección para
andar tu propio camino, creando etapas o manteniéndote quieto cuando sientas
que resulta apropiado para ti.
No
puedo ver siempre el cuadro más grande del Orden Divino, así que no emitiré
juicio sobre si tus pasos, los das grandes o pequeños, ligeros o pesados o si
conducen hacia arriba o hacia abajo, porque esto sólo describe mi punto de
vista.
Aunque
vea que no haces nada y me parezca que esto podría considerarse indigno, yo
reconozco que puede suceder, que tú vayas a traer una gran sanación al
permanecer en calma, bendecido por la Luz del Gran Espíritu.
Porque
toda forma viviente tiene el derecho inalienable de elegir su propia evolución,
y sin reserva ni duda, reconozco tu derecho a determinar tu propio futuro.
Con
humildad, me postro ante la comprensión, de que el camino que veo y que me
parece mejor para mi, no significa que también para ti resulte correcto, y que
lo que yo creo, no necesariamente tiene que parecer verdad para ti.
Sé
que te guían a ti como me guían a mi, y que sigues tu entusiasmo interno para
conocer tu propio camino.
Sé
que las muchas razas, religiones, costumbres, nacionalidades y creencias en
nuestro mundo nos traen una gran riqueza y nos procuran los beneficios y
enseñanzas de una gran diversidad de formas de percibir la vida y el mundo.
Sé
que cada uno de nosotros, aprende en su manera única para devolver ese amor y
sabiduría al TODO.
Entiendo
que si sólo hubiese una forma de hacer algo, sólo necesitaría haber una
persona.Apreciaré tu luz interna única, te comportes o no, dé la manera en la
que considero que deberías hacerlo y aunque creas en cosas que yo no creo.
Te
veo verdaderamente como mi hermano y mi hermana, aunque puede que hayas nacido
en un lugar diferente y creas en diferentes ideales.
El
amor que siento, lo siento absolutamente por todo lo que EXISTE.
Sé
que todo lo vivo, forma parte de una conciencia mayor, y siento un amor
profundo por cada persona, animal, árbol, piedra y flor, por cada pájaro, río y
océano y por todo lo que hay en el mundo.
Vivo
mi vida en servicio amoroso, haciéndome el mejor YO que pueda, haciéndome más
sabio en la perfección de la Verdad Divina, haciéndome más feliz, más sano, y
cada vez más abundante y gozoso.
Aunque
a lo largo del camino, puede que me gustes, sienta indiferencia por ti, o me
disgustes, no voy a dejar de amarte, de honrar tu singularidad y de dejarte
vivir y expresarte como tú quieras hacerlo.
Considero
que esto construye la llave de la paz y armonía en nuestras vidas y en nuestra
Tierra porque le da forma a la piedra central del Amor Incondicional.
In
La K’Ech