LA MAGIA DE LA NAVIDAD.
¡Amados míos!
¡Seres de luz y amor, que en este sagrado periodo de la Navidad os unís en vibraciones de paz y renovación! Yo Soy Saint Germain, vuestro guía en la senda de la ascensión y la transformación espiritual. En estos momentos de celebración terrenal, permitidme compartir con vosotros la esencia metafísica que impregna la Navidad.
La Navidad es mucho más que un evento histórico o una tradición cultural; es un portal de luz que se abre en los corazones de todos los seres. Es un tiempo donde la energía de la compasión, la gratitud y el amor inunda el universo, recordándonos la verdadera naturaleza de nuestra existencia.
En el simbolismo de la natividad, encontramos la representación de la luz divina que nace en el interior de cada ser humano. El nacimiento del Niño Jesús es el renacimiento de la pureza, la inocencia y la esperanza en cada alma. Es la oportunidad de renacer, de dejar atrás las sombras del pasado y permitir que la luz interior ilumine nuestro camino hacia la ascensión espiritual.
La estrella de Belén, luminosa y guía, nos recuerda que siempre hay una luz que nos muestra el camino, una luz que brilla en nuestros corazones y nos conduce hacia la sabiduría y la comprensión espiritual. En estos días, esta estrella brilla con mayor intensidad, invitándonos a conectarnos con nuestra divinidad interior y con la unidad que une a toda la creación.
La magia de la Navidad no reside en los regalos materiales, sino en el regalo más preciado: el amor incondicional. Es el momento de compartir este amor con todos los seres, de perdonar y sanar heridas pasadas, de abrazar la compasión y la empatía hacia nuestros semejantes.
La figura del Maestro Jesús, irradiando amor y comprensión, nos muestra el camino de la redención a través del perdón y la compasión. Él nos enseña que el amor es la fuerza más poderosa del universo y que cada uno de nosotros tiene el poder de transformar la propia vida y el mundo entero a través de ese amor.
En esta época, las energías cósmicas están alineadas para apoyarnos en nuestro viaje espiritual. Es un momento propicio para la meditación, la reflexión y la conexión con nuestra divinidad interior. Aprovechemos esta oportunidad para elevar nuestras vibraciones, para sembrar semillas de amor y paz que florezcan en nuestro camino hacia la iluminación.
Amados Seres de Luz, que la magia de la Navidad os envuelva en su cálido abrazo, recordándoos vuestra magnificencia y vuestra conexión con la fuente universal de amor. Que vuestro corazón se llene de alegría, gratitud y paz en esta etapa de renacimiento espiritual. ¡Que la luz divina guíe vuestro camino hacia la plenitud y la ascensión!
Que así sea, en amor y luz infinitos.
Bendiciones para todos en esta sagrada época de la Navidad.
Con Amor y Luz,
Saint Germain
🙏
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