El mundo está en una
transición de largo alcance hacia un nivel superior de conciencia y este es un
momento difícil para todos por los cambios internos que ocurren. Se les pide a
los habitantes de la Tierra dejar de lado todas las expectativas previas en
cuanto a cómo deberían parecer sus vidas en el reino material y obsesionarse
tanto con eso. Cada individuo tiene que pasar tiempo a solas para reajustar y
sopesar aquellas áreas de su vida, mirando particularmente en donde se está
utilizando su energía personal. Es un momento para mirarse cada uno como el
creador de todo lo que se está experimentando. Es hora de asumir la
responsabilidad por todas las decisiones tomadas de forma individual y
colectiva. Esto puede ser abrumador para alguien que quiere vivir fiel a sí
mismo y aun seguir viviendo su vida material e interactuar con los demás a su
alrededor. Es difícil dejar atrás el yo y las limitaciones impuestas por la
sociedad que les han acosado y centrarse realmente en la creación de una vida
pacífica y próspera. Sin embargo, esto es lo que se abordará de aquí en
adelante.
Optar por vivir de
acuerdo con los dictados del corazón en lugar del intelecto, les traerá mayor
satisfacción en todas las áreas de sus vidas. La gente va a empezar a disfrutar
de cada momento que está viviendo en lugar de estar centrada en 'algún día o en
algún momento " en el que van a empezar a disfrutar de la vida.
Reevaluarán su forma de adquirir las cosas que ofrece este mundo y que los hace
felices una vez que las consiguen. En su lugar, su atención se desplazará a su
mundo interior y a la conciencia, estiramiento y expansión de sus creencias
anteriores sobre lo que es posible y, de esta manera, conseguirán su libertad
personal. Se liberarán a través de la utilización de sus energías personales
hacia la realidad que quieren experimentar y tomarán las medidas necesarias
para que sea posible sin condenarse a sí mismos a mayores endeudamientos y
carga de trabajo. Será una experiencia liberadora cuando se den cuenta de que
realmente no necesitan todas las cosas que pensaban que necesitaban para
encontrar la felicidad en sus vidas personales.
Cada vez que un
individuo se auto libera de la ilusión de la necesidad de adquirir cosas con el
fin de encontrar la felicidad, se produce un mayor empoderamiento por la
experiencia colectiva. Con el tiempo, la sociedad se va a liberar en su
conjunto de los rígidos límites de la necesidad de adquirir más artículos al
darse cuenta a través de su propia experiencia que no necesitan la mayoría de
ellos con el fin de vivir una vida feliz. Se darán cuenta de que pasar tiempo
con sus familias y amigos en formas alegres y significativas es mucho más
importante para ellos. Este cambio en la conciencia está en proceso ya que las
personas crecen y expanden sus conceptos de lo que es posible para ellos. Se
están dando cuenta de que lo que permiten es lo que va a entrar en su
experiencia. A medida que trasciendan las limitaciones del pensamiento y
expectativas previas y se muevan más allá, hacia las posibilidades ilimitadas,
van a manifestarse más que nunca en un nivel superior de conciencia.
Mientras esto ocurre
dentro de cada individuo, surgirá un deseo interno para dar a otros de maneras
significativas que los enriquezcan y empoderen para que también los otros
avancen hacia posibilidades ilimitadas en sus propias vidas. Cuando se produzca
el cambio de conciencia a un nivel de funcionamiento más elevado dentro de cada
corazón humano, muchas manifestaciones milagrosas comenzarán a suceder y es
cuando una rápida aceleración de la evolución y expansión de la especie humana
comenzará a producirse. Lo que tardó muchos años en lograrse comenzará a
llevarse a cabo de un día a otro. Cuando la humanidad colectivamente se centre
en crear su visión de un mundo mejor y más pacífico y próspero para todos;
cuando la visión colectiva sea capacitar y dar a sus vecinos lo que necesitan
para seguir adelante, entonces una realidad mejor se manifestará rápidamente
para todos.
Este umbral se
encuentra ahora ante cada quien, para manifestar lo que aporte una mayor
ligereza de ser de cada corazón humano, porque es la apertura del corazón el
catalizador que traerá consigo el mayor cambio en la sociedad. El barómetro del
futuro será la belleza dentro del corazón y su expresión en el mundo exterior.
La luz verdadera de cada individuo brillará cada vez con más intensidad y se
ampliará el conocimiento de los reinos superiores de existencia. Cada individuo
sentirá y expresará más alegría, risa y buena voluntad en sus actividades
mundanas cotidianas. Lo que se denomina altruista en el viejo paradigma mundial
se convertirá en la norma en la nueva conciencia que ahora está amaneciendo.
HILARION.
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