sábado, 24 de enero de 2015

ALMAS COMPAÑERAS DE VIAJE

Una relación entre almas se sustenta en la amistad, la confianza, la admiración y el interés por las actividades y sueños de la pareja. El respeto mutuo, la sinceridad y la complicidad fortalecen el vínculo, así como el honrar y valorar la relación. El erotismo es esencial en la relación de pareja: nos gusta estar cerca del otro, sentirlo, tocarlo, saborearlo también físicamente, y no sólo en la intimidad sexual. Recordemos que el placer y el disfrute refuerzan el vínculo entre la pareja.

La valoración recíproca es otro de los fundamentos del amor. Necesitamos ser amados como únicos e insustituibles, brillar con luz propia en la relación. Según Alberoni: «Una pareja sigue enamorada si las dos personas cambian, crecen, se transforman y se reencuentran, se redescubren, y se vuelven a ver con los ojos resplandecientes del estado naciente». Por eso es esencial preservar aquello que hubo en la atracción inicial, en los albores del encuentro, para poder recurrir al fuego original en los momentos de oscuridad.

Así pues, en una relación de seres en proceso de crecimiento se elige al otro como compañero/a, no para que nos salve, proteja, sostenga o adore. Tampoco para escapar de una situación o para que nos proporcione seguridad. Optamos por una relación privilegiada para brindarnos la oportunidad de ir un poco más allá en nuestro viaje hacia el corazón, lo que significa que a través de la relación podemos conocernos, expresarnos y desarrollarnos con una mayor profundidad.

VARIEDAD DE SERES QUE CONVIVIMOS EN LA TIERRA


Es conmovedor  ver la gran variedad de estados evolutivos en este planeta. Esto no depende de clases sociales u otras trivialidades materiales. Algunas personas tener  auras brillantes e irradian una energía amorosa de alto nivel; algunos de ellos son verdaderos maestros, con experiencias en muchos lugares y capaces de lograr grandes cosas; muchos de ellos, aún inconscientes de su nivel, misión y origen.

Otros, sin embargo, son menos evolucionados. No han  tenido la mismas experiencias previas o al menos no se han  esforzado por aprender de ellas.
Vienen de distintos lugares. La Tierra es un lugar de convergencia de varias fuerzas. Es un planeta en proceso de cambio. Aquí se ven seres de diferentes estados evolutivos, conviviendo y aprendiendo unos con otros. Esto es permitido por las leyes cósmicas en planetas en transición y próximos a dar un salto en su evolución.

Aquí hay  seres que en su ignorancia destruyen la vida física de otros seres. Hay  algunos que en su afán de poder, esclavizan, martirizan o dañan. También hay aquellos que destruyen su entorno y hacen que el medio ambiente se resienta. Estos seres han venido de planetas donde este tipo de circunstancias y acciones son normales. Son planetas de niveles evolutivos bajos, donde esta es la forma de coexistir.

Aquí en la tierra no encontramos  con seres de altos niveles evolutivos; muchos superiores al vuestro. Ellos también han nacido en la Tierra para aprender. Estos seres han descendido voluntariamente para llevar a cabo una misión de ayuda.

Casi todos ellos aún no recuerdan de dónde vienen y para que están ahí. Sin embargo, con el tiempo irán despertando.

Un nuevo tiempo se acerca para la Tierra. Es un amanecer donde la luz cubrirá a todo el planeta y a sus habitantes. Es una luz espiritual que elevará el nivel vibratorio hacia el amor y la convivencia pacífica. En este amanecer habrá quienes despierten antes que otros. Son aquellos quienes irán ayudando primero a labrar la nueva tierra para que las semillas del amor universal germinen. Habrá quienes no estén preparados para este amanecer, y por haber permanecidos dormidos por mucho tiempo, la luz del alba de la nueva Tierra los deslumbrará y no podrán permanecer allí. Deberán ser trasladados a lugares aptos para su evolución, luego de la cosecha. Sólo en ese momento podrán separarse las semillas, según su desarrollo espiritual.

Aquellos seres de gran amor y sabiduría que están aún durmiendo en la Tierra y que no han recordado su origen y misión, al convivir con otros seres que causan daño, experimentarán un gran conflicto y se sentirán desadaptados. Será como estar en un lugar al que no se pertenece. Y a las acciones de los seres menos evolucionados las juzgarán como “maldad”.

La “maldad” no existe en el universo. Aquello que algunos llaman “maldad” es solo la ignorancia. Si un ser destruye la vida material de otro ser, o lo esclaviza de alguna manera, está desconociendo las leyes universales, leyes de la Creación, que lo llevarán a padecer una situación igual a la que causa. Por lo tanto, ese ser que hace daño, es un ignorante y desconoce que es a sí mismo a quien estará finalmente maltratando. Si comprendes esta realidad, tendrás mucha libertad. No veas a ningún ser como “malo” o “malévolo”. Si lo ves como alguien ignorante o en proceso de aprendizaje, más fácilmente podrás ayudarlo; aunque sea simplemente con tu ejemplo. El amor es la energía universal, energía de la Creación opuesta a esa ignorancia.

Aquellos que dañan a otros seres lo hacen porque para ellos esto es normal en el estado de conciencia al que pertenecen, y del que provienen. Al ser rechazados por la sociedad de la Tierra, irán aprendiendo y habrán elevado su energía individual, así no logren llegar a ese nivel mínimo requerido para seguir en la nueva Tierra.

Aquellos seres que pertenecen a niveles superiores, estarán afianzando sus enseñanzas adquiridas en experiencias previas y también habrán de evolucionar. Todos aprenden, todos evolucionan.


Son muchos los seres que desean estar en la Tierra en estos momentos. Son momentos difíciles, pero permiten un aprendizaje acelerado. Son muchos los que quieren ayudar, bien sea descendiendo directamente o naciendo en cuerpos físicos. No a todos se les permite hacerlo. Algunos que llegan directamente del espacio, tienen la ventaja de recordar quiénos son y qué han venido a hacer. Sin embargo, son muchos los peligros que hay en la Tierra y muchas las posibilidades de quedar atrapado en la tercera dimensión. Deberán   ser cuidados.

SANANDO NUESTRO NIÑO INTERIOR

Tenemos dos lados diferenciados en nuestra personalidad, el Niño y el Adulto. Cuando están bien conectados todo funciona bien, si no es así porque las experiencias, las heridas han hecho que se desconecten una de la otra, se crean conflictos, vacíos etc.
Inclusive podemos pensar que no podemos actuar como un niño, ya que estos son alborotadores, inquietos etc. Y así al igual que lo valoraron de niño, puede que lo valoremos nosotros ahora, sin justicia para ese niño que todos llevamos dentro.
Nuestro niño tiene unas emociones completas, intensas, de alegría, de felicidad, de tristeza. 
Es nuestro hemisferio derecho, es el SENTIR, el VIVENCIAR, nuestro hemisferio izquierdo es el adulto, hace, PIENSA, ACTÚA.
Cuando de niños se vive abandono, maltrato, nos avergüenzan etc. El dolor es tan grande, tan insoportable que el ADULTO INTERIOR SE DESCONECTA del NIÑO INTERIOR para no sufrir. Así el niño interior se encuentra solo, aislado del mundo y en nuestro interior, puesto que no hay nadie que lo proteja.
Al crecer y desarrollarse.Si el Niño Interior se siente criticado, descuidado por el Adulto Interior, y se proyecta así en los sentimientos de los demás; siente que los demás son controladores, critican o abandonan, sea o no cierto.
La Ira que siente el NIÑO INTERIOR el ADULTO INTERIOR “no amoroso con él, no la escucha, así que la Ira la sentimos hacia los demás, cuando somos adultos no es solo el rechazo hacia los demás si no también hacia nosotros mismos.
El perfeccionismo, el miedo y demás son síntomas de la DESCONEXIÓN ADULTO -NIÑO y como victima también puede hacerse adicto a sustancias o a cosas, porque que necesita amor protección, aprobación y se siente merecedor de ello, puede reaccionar con ira, con violencia o con silencio.

Sin embargo el niño amado, hace que este conectado a su ADULTO INTERIOR es sensible, alegre. Lo que hace que la acumulación de las experiencias del niño, es que podamos SENTIR y cuando no podemos hacerlo no podemos usar la sabiduría. Y es difícil ser simpático, alegre, divertirse etc. Igual que todos los niños que son espontáneos, cantan, se abrazan etc.

viernes, 23 de enero de 2015

TRABAJAR CON EL NIÑO QUE LLEVAMOS DENTRO

El trabajo con el Niño Interior es quizás uno de los más profundos y sanadores. Según Louise Hay y muchos terapeutas, casi todas nuestras creencias y patrones de comportamiento, tanto negativos como positivos, los aceptamos cuando teníamos entre 3 y 5 años. A partir de entonces, nuestras experiencias se han basado en lo que aceptamos como verdad desde aquella época de nuestra vida. 
Si hemos crecido en un hogar "disfuncional", donde nos criticaban constantemente, nos exigían perfección, donde existía falta de amor y de cariño, lo más seguro es que actualmente continuemos tratándonos del mismo modo, minando así nuestra autoestima y energía. 
Imagínense a un niño pequeño que llega a su casa orgulloso del dibujo que ha realizado en la guardería y se lo enseña a sus padres. En el primer caso, los padres le felicitan y le dicen que es un niño muy listo, creativo, habilidoso, etc... En el segundo caso, los padres le dicen que está fatal, que es torpe, que no sabe dibujar y que se sale de las líneas. 
Obviamente, en una familia donde al niño se le aprecia, estimula a crecer, a aprender y se le da muestras de amor, el niño florecerá. Sin embargo a un niño que se le critica constantemente, se le retira el afecto si no lo hace todo bien, etc... el pobre niño se retrae y deja de intentar aprender, crecer, o se vuelve un perfeccionista, sufriendo constantemente porque nunca estará satisfecho con los resultados. 
Ahora bien, lo que nos hicieron en el pasado no lo podemos controlar. Lo que sí podemos hacer es tomar nuestro poder aquí y ahora y dejar de tratar a nuestro niño como nos trataron a nosotros. Entonces no teníamos elección, ahora sí. El momento de poder es siempre el presente, y es muy triste y doloroso si continuamos criticándonos y maltratándonos. Así no hay forma de crecer, de amar, de ser los seres maravillosos que somos y DEJAR BRILLAR NUESTRA LUZ. 

Volver a establecer una relación con nuestro niño desde el amor y la comprensión es la mejor forma de sanar nuestra dañada autoestima. Es la única manera de realizar cambios positivos en nuestra vida: establecer relaciones sanas, cuidar nuestro cuerpo, trabajar en algo que nos gusta, ser prósperos, amar incondicionalmente y llegar a sentirnos plenos y feliz. Cuando cambiamos desde el AMOR todo nos sale bien.

ENCONTRAR EL PROPÓSITO EN LA VIDA

¿Quién soy?, ¿De dónde vengo? y ¿Para qué estoy aquí?. Desde Aristóteles hasta la actualidad, estas preguntas resuenan en nosotros, los seres humanos. Pero quizás es la última de ellas la que nos conecta con nuestra realidad y plantea modificar nuestra vida y encontrar un sentido. 
Los seres humanos tenemos el potencial de vivir una vida significativa, y esto comienza encontrando un propósito en la vida. Tener propósito en la vida marca la diferencia entre vivir, o simplemente existir. Podemos decir que descubrimos nuestro propósito cuando despertamos a una realidad más sutil. A la que podríamos definir como más amplia. Y esto, parece llegarnos en la mayoría de los casos, ante una adversidad que nos estremece, o como lo llamamos los coachs, un quiebre, que nos hace cuestionarnos sobre los principios y valores que sustentan lo que consideramos nuestra realidad.
EL APRENDIZAJE: La vida es una escuela, y los seres humanos somos como dioses en potencia. Quizás es por eso no conocemos nuestro propósito de antemano. Nos toca descubrirlo ya que de esta manera se irán desenvolviendo tanto nuestras cualidades, habilidades y destrezas, como nuestra comprensión, aceptación y asimilación de realidades más sutiles.
La vida es un devenir constante. Las personas creen que han descubierto el mundo que las rodea, y comienzan a sentirse cómodos creyendo que lo dominan. Pero ocurre algún evento que las hace cuestionarse sobre la veracidad y exactitud de su observación y percepción del mundo en el que viven. Y es ahí, donde comienza la nueva búsqueda para ampliar sus horizontes. Nos volvemos conscientes sobre la sincronicidad e influencia de todas y cada una de sus acciones en el mundo que nos rodea.
Un ejemplo sería, nuestra adolescencia, donde considerábamos que el mundo solo era nuestro vecindario, estado o país. Y comenzamos a percibir el afuera: los ciudadanos de todos los países del mundo vivimos en un mismo planeta, respirando el mismo aire, bebiendo la misma agua, y comiendo los mismos alimentos. Esto nos abre a una nueva conciencia sobre nosotros mismos.
EL DESPERTAR: Este mirar con otros ojos, es el primer paso hacía plantearnos encontrar un propósito para nuestras vidas, o en realidad, descubrirlo. Si aún no tenemos un propósito claro en la vida, nuestro primer propósito debería ser encontrarlo...
La importancia de tener un propósito claro en la vida podemos verlo reflejado en las vidas de las personas más exitosas que se encuentran registradas en la historia de la humanidad. Por ejemplo, el propósito de Henry Ford era "Masificar la producción, distribución y el consumo de autos.", el de Walt Disney era "Hacer feliz a la gente.", y el de la Madre Teresa de Calcuta era "Cuidar y confortar a los pobres, enfermos y necesitados de todo el mundo.".
Estas declaraciones poderosas les dieron sentido y le otorgaron significado a cada una de sus acciones. Y a partir de ese momento todas sus metas giraron en torno a hacer realidad ese propósito que descubrieron.
METAS VS. PROPOSITO: Es importante mantener claro que las metas son simplemente el fin hacía el cual dirigimos nuestros deseos y acciones. Y aunque es excelente, y recomendado, establecer metas para facilitarnos alcanzar el éxito, éstas por si solas pueden carecer de discriminación y dirección.
Podemos tener tantas metas como consideremos conveniente, pero solo cuando definimos nuestro propósito es que nuestras metas adquieren significado para nosotros y percibimos por cuál dirección debemos encaminarnos a hacerlas realidad.
Cuando descubrimos nuestro propósito, nuestra vida se aclara y adquiere perspectiva. Y a partir de ese momento no volveremos a ver el mundo que conocíamos, veremos un nuevo mundo, una nueva vida, una nueva realidad, mucho más amplios en la cual formamos parte integral del todo.
SEMBRAR: Todos tenemos sueños, así como todos tenemos talentos, pero tal vez estos no se actualicen hasta que encontremos un propósito que nos conecte con valores lo suficientemente elevados para motivarnos a expresarlos al máximo y compartirlos.
Nuestros talentos son dones que nadie más posee en la misma medida, y con ellos podemos hacer cosas que nadie más puede hacer de la misma manera, lo que nos da la maravillosa oportunidad de expresarlos para enriquecernos y a la humanidad entera.
Mi proposito es despertar a los otros…y el tuyo?. Te invito a comenzar este camino haciéndote una pregunta: ¿cómo puedes ser tú, un regalo para el mundo?.

 Margarita Solari

LO QUE VIENE A NIVEL PLANETARIO E INDIVIDUAL

La galaxia en la cual el sistema solar se encuentra, tiene dos haces de radiación opuestos entre sí, los cuales giran enviando hacia el exterior bandas energéticas que elevan el nivel vibratorio de las estrellas que la conforman.
Tú sabes que las estrellas, los planetas y todos los seres del universo son manifestaciones de esa energía universal, son manifestaciones de la Creación, o Dios, como le llaman en la Tierra. Cada uno está en un nivel vibratorio dado, y cuanto más alto sea, más cerca de Dios se encuentra. Por ese motivo se recomienda mantener cada vez más alto tu nivel de conciencia, para que puedas evolucionar.

 Al girar el centro de la galaxia, esa irradiación de las bandas opuestas que se mencionó, crea una estructura espiral. Entre muchos planetas de la galaxia, la Tierra fue escogida por su localización. Dentro del plan divino se convino poblar el planeta con vida que pudiera contener a los seres que quisieran evolucionar más rápidamente al enfrentarse a las dificultades de las dimensiones inferiores. Al girar el haz de radiación, este se irá acercando hacia el sistema solar. Por esto el nivel vibratorio ascenderá en la Tierra y sus habitantes tendrán que hacer lo mismo. Este planeta está entrando en una zona de alta radiación y grandes cambios se están produciendo; la mayoría de ellos no son percibidos por sus habitantes.

Debido al mal manejo de los pensamientos, los seres humanos han creado un clima de energías de bajo nivel vibratorio en todo el planeta. Ellos aún no han comprendido totalmente que su comportamiento individual afecta el comportamiento global. Son como células de un cuerpo, un cuerpo que está enfermo. Por siglos ellos han venido llenando de esas energías densas el ambiente que los rodea.

Cuando la Tierra avance aún más hacia las zonas de mayor vibración, todos los seres del planeta recibirán una aceleración intensa, y aquellos que mantengan todavía ese nivel bajo, no podrán resistir. Su cuerpo no podrá contenerlos más y su espíritu saldrá expelido a través de túneles interdimensionales hacia planetas de niveles bajos; a los que realmente pertenecen.

Es muy importante que los habitantes del planeta Tierra se llenen de amor en sus corazones, pues este será el boleto de entrada a la nueva dimensión de la Tierra. Tú debes irradiar esa energía que puede ayudar a que algunos despierten, se conozcan a sí mismos y recuerden su misión en este planeta, y comprendan qué deben hacer para ayudar a otros en este momento. Pero no puedes obligarlos a cambiar; ellos mismos deberán hacerlo.


Se acerca el momento de la cosecha. Los frutos deberán ser recogidos.  Es importante un cambio global y este no se logra sin un cambio interior y personal. Muchos seres como  tú deben ayudar a que esto suceda.

jueves, 22 de enero de 2015

LA CULPA

La culpa.
La culpa no tiene razón de ser.
Sentirse culpable es recibir una descarga energética que te apabulla, te somete y te controla, descarga proveniente de otras personas que no asumen la responsabilidad de los resultados de sus acciones, tienen un súper EGO que no permite el error ni la equivocación e  influye para culpar a otros.
Cuando la culpa la imponemos nosotros mismos es porque no asumimos la responsabilidad de nuestra vida, no tenemos confianza, nos sentimos inferiores y sin capacidad, nos clavamos el puñal de la autoculpa y martirizamos nuestra vida.  Si la culpa es porque  hiciste daño a alguien, entonces recurre al perdón entendiendo y comprendiendo la situación y recurriendo a la compasión para entender como se puede estar sintiendo la otra persona. Recuerda todo sucede por la ley de causa y efecto, por esto debes tener la conciencia tranquila y en paz para que no te atormente.
Cuando entendemos que no hay que culpar a nadie por lo que ocurre, que las situaciones simplemente suceden y son necesarias para nuestro desarrollo y crecimiento espiritual, entonces habremos dado un gran paso en nuestra vida.
Para evitar la culpa lo mejor es reconocer que las cosas no salieron como deseamos, aceptar el resultado y evaluar que aprendimos de esa experiencia.
Hay una oración de la iglesia católica  llamada YO PECADOR que reza:
"Yo confieso ante Dios Todopoderoso y  ante vosotros, hermanos, que he pecado mucho de pensamiento, palabra, obra y omisión: por mi culpa, por mi culpa, por ..."
Así nos enseñan que nuestras equivocaciones consecuencia de nuestro aprendizaje en la vida son pecados y nos debemos sentir culpables. Y empieza nuestro tormento porque nos sentimos impuros  tenemos que buscar que Dios nos perdone mediante nuestras oraciones o a través de la confesión sacerdotal. Es esta la manera como la iglesia mantiene su dominio sobre estas ovejas dormidas en su inconsciencia.

 Lo mas importante es entender que la culpa no tiene razón de ser.

Cuando culpas a alguien por lo que te sucede lo que estas haciendo es entregando el control de tu vida.

miércoles, 21 de enero de 2015

RELATO DE MISION EN EL PLANETA TIERRA

Han pasado ya varios meses desde que dejé aquel planeta azul, y aquellas personas que tanto amo. Mi ser ha crecido enormemente por todas las experiencias que viví allí. Hoy me encuentro escribiendo este informe, no para mis superiores, sino para mí mismo, o para alguien que algún día en la Tierra pueda llegar a leerlo. He aprendido mucho sobre el destino del planeta y sé que pocos humanos saben lo que se avecina, y la razón de ello.
Con esta historia real que narro aquí, busco recordar todo aquello que me sucedió. Quizás, si las leyes de la Creación lo permiten, con esta narración algún humano que ha estado durmiendo pueda despertar y recordar su verdadera misión en el planeta.

¿Quién soy yo? Bueno, digamos que soy un habitante del cosmos. No soy como los humanos. He tenido experiencias que pocos seres han vivido. O si lo han hecho, ya lo han olvidado. Para algunos soy un extraterrestre. Sin embargo, esta palabra me hace sentir como un extraño. Comprendo que hago parte de todo y de todos los seres. Hoy en día me siento más humano que nunca.

Al comienzo me encontraba allí, en la gran ciudad. Mi apariencia era la de una persona joven y con vestiduras muy pobres. Rodeado de millones de personas y, sin embargo, muy solo. Todas ellas conducían con afán sus vehículos, o caminaban rápidamente por las calles rumbo a su trabajo o estudio. En todo momento recordaba a Zitnia, el lugar de donde vengo, y el contraste entre estos dos mundos me afectaba profundamente.
—Jendua, debes comprender que cada mundo posee lo que necesita— me decía mi guía antes de bajar a ese planeta—. Cuando estés en la Tierra verás grandes contrastes; no debes pensar que los terrestres son desafortunados, simplemente están en un medio en el cual deben aprender. En algunos mundos como este, aun teniendo las dificultades materiales, el corazón puede ir despertándose hacia las riquezas espirituales.

Algunos, rodeados de muchos lujos, erróneamente se sentían grandes. Otros, al no tener las mismas comodidades materiales que pocos poseían, erróneamente se sentían pequeños. Lo que más me afectaba era ver en muchos de ellos cómo en su pecho no brillaba la luz amorosa de su ser interno. Su aura irradiaba levemente un color grisáceo y sus pensamientos eran muy discordantes. Muy pocos comprendían el verdadero sentido de la existencia. No entendían el propósito de su paso por este planeta. Tampoco llegaban a imaginar lo que vendría más adelante, fruto de sus irresponsables acciones. O quizás lo intuían, pero se negaban a afrontarlo entregándose a la rutina diaria. Muchos ni siquiera buscaban en su interior a su guía, ni sentían la presencia de Dios o de la Creación en cada hoja, en cada árbol, en cada gota de lluvia o en cada átomo del aire que respiraban, ni en cada ser que les rodeaba. En medio de millones de hermanos, ellos se sentían seres aislados, individuales, solos... Aún faltaba mucho para que expandieran su luz amorosa y se hicieran uno con el universo.
—Así tiene que ser —me explicó mi guía—. En la Tierra y en lugares similares se aprende de esa manera. Cuando estés allá abajo, los verás imperfectos, inconscientes de la realidad y del propósito de su existencia. Sin embargo, a pesar de esto, debes sentir su ser interno, perfecto y puro, irradiarles amor y darles ánimos para continuar. Debes mirar más allá de lo que la tercera dimensión te muestra.
Y mi guía tenía razón. Si yo observaba de la misma manera que ellos lo hacían, sólo veía injusticia, dolor, egoísmo, ansiedad y soledad. Llegué a sentirme deprimido y me avergonzaba por eso, pues la depresión es un crimen en el lugar de donde vengo. Con ella sólo logran irradiarse pensamientos discordantes impidiendo la ayuda a otros seres y a sí mismo.

Y allí estaba, en aquel planeta, en mi nueva misión.
—La Tierra está próxima a una gran cambio cósmico —me había dicho el comandante de la misión. Eso era lo mismo que me enseñaba mi guía.

Sabía que el cambio vendría muy pronto y que seres como yo, de varios planetas, llegábamos a la Tierra a ayudar a nuestros hermanos cósmicos. Esos cambios no son fáciles y no todos están preparados para afrontarlos. El momento de la cosecha se acercaba, decían los guías. Era el punto de convergencia de muchas fuerzas de diferentes dimensiones en un mismo lugar del universo y en un mismo momento de la evolución. Y algunos que ya habían sido enviados anteriormente permanecían dormidos. Parece increíble que un ser que ha estado viajando por innumerables mundos, aprendiendo y ayudando, al llegar a la Tierra se hubiera olvidado de todo.

—Parte de tu misión es despertar a Zendor y así ayudar a despertar a otros como él —me aclaraba mi guía—. Él fue enviado hace muchos siglos y con el tiempo ha olvidado el verdadero propósito de su misión. Al despertar, el ayudará a otros a abrir su corazón y a recordar su verdadera identidad.

ENTENDIENDO AL AUTISTA

El autismo es el rechazo último de enfrentarse a la realidad física del mundo exterior, lo cual trae una forma de repliegue sobre mi mundo exterior en el cual reinan lo imaginario y los fantasmas.
Huyo una situación o mi entorno porque me duele demasiado, o porque veo mi sensibilidad maltratada. Mi pena, mi tristeza o mi desesperación son tan grandes que me “corto” de lo físico mientras sigo teniendo este mismo cuerpo físico. El mundo exterior me aparece como hostil y amenazador.
El hecho que yo, como persona autista, me haya “encerrado” voluntariamente en mi “burbuja” hermética implica que reciba miles de informaciones al día que están “almacenadas” y “guardadas” en mi mundo interior en vez de intercambiar éstas con otras personas. Me hallo en un agujero negro, una carretera que me parece sin salida. Tengo la sensación de que los criterios que debo alcanzar son tan altos que es más fácil retractarme dentro de un mutismo en vez de tener que superarme constantemente y tener que “rendir cuentas” a otros (padres, profesores, autoridad, jefe, etc....)

Es posible tratar este tipo de caso, pero las curaciones serán mucho más interiores que exteriores, suponiendo que existan. De cualquier forma, mi entorno debe ser capaz de comunicar a partir del interior (o del mundo interior) conmigo para llevarme a conectarme de nuevo o más con el mundo físico. Así, proyectándome en mi mundo interior, se puede tomar contacto mejor conmigo y reconocer mejor mis necesidades y mis miedos para que pueda luego manifestar la confianza y la apertura necesarias para volver a conectar con el mundo físico.

IR AL INTERIOR

Si siguen corriendo desesperadamente en el exterior, no llegarán a ningún lugar Deben hacer sus maletas y emprender el viaje al interior del alma y llegar si es posible, al subconsciente. En esa travesía interna deben descubrir sus vidas, conocer sus emociones positivas y negativas, entenderlas, trabajarlas y convertirlas en un oasis de Armonía y paz para que se reflejen en la calma del alma madura y ecuánime. Aprendan a amarse y amar a los demás, solo así podrán trasmutar lo que tanto les incomoda y confunde, que no es otra cosa que el reflejo en el espejo de... USTEDES MISMOS.

Deben empezar el proceso de auto-conocimiento y de sanación tienen que bucear profundamente en el interior y encontrar la raíz de los problemas, solo así harán una verdadera sanación del alma. Es un proceso que requiere tiempo, dedicación, fuerza y voluntad, que los puede llevar a grandes éxitos, aportándoles cambios beneficiosos de crecimiento. El auto- conocimiento y el poder de uno mismo, junto a las herramientas adecuadas que el universo les otorga, son instrumentos poderosos y esenciales para la sanacion.

 El gran desafío de la vida, el gran reto, está dentro de ustedes, ya que cuando se domina al enemigo interior, ahí fuera no hay nada ni nadie lo suficientemente grande para detenerlos Cuando el interior está bien, las emociones y la realidad interna fluyen de manera positiva, convirtiendo al mundo en un reflejo del interior. ¿Cómo está el mundo exterior? ¿Los seres humanos viven en Paz y Armonía? ¿Las necesidades básicas están cubiertas? ¿La educación es de todos y para todos? ¿Las enfermedades erradicadas? ¿Las guerras terminadas? ¿La ambición y codicia exterminadas?... Es por este motivo que la mayor inversión del ser humano tiene que ser en él mismo. Porque cuando ustedes están bien, el mundo está bien, pero cuando ustedes están mal, el mundo anda de cabeza.


Es hora que tomen consciencia, que agarren una escoba y comiences a limpiar el sótano de tu casa, es ahí, en ese lugar oscuro y tenebroso del subconsciente, donde encontrarán sus respuestas y no corriendo detrás de supuestas sanaciones. Al ordenar y sacar todo lo inservible, empezarán a descubrirse por primera vez en la vida, abrirán las ventanas del alma y dejarán entrar la LUZ y el AMOR. Y es así que entenderán, que si ustedes no te responsabilizan, arreglan y limpian el sótano de la vida, nadie lo hará por ustedes.

EL PERDON

 
El perdón , es la llave mágica que todos debemos encontrar para sanar cualquier tipo de relación. El perdón es una expresión de amor hacia nosotros mismos y los demás. Perdonar es" aceptar" las cosas como son, no implica que tiene que gustarte lo que estás viviendo, es liberarte de sentimientos de odio, rencor, envidia, liberándote de ellos, liberas a los demás, no los retienes en tu mente, dejas libre a esa persona que te ha herido. 

El perdón es realmente un acto de amor a nosotros mismos, y a mi entender, algo que nos cuesta mucho poner en práctica. Cuando decides no perdonar, lo único que haces es estancarte en emociones negarivas. La falta de perdón te ata a la otra persona o a la situación que no puedes olvidar y una y otra vez vuelves a recordar y traes al presente tu dolor. Esto te desvastará mucho más a ti que a la otra persona, porque cargar con esos sentimientos donde quieras que vayas y con quien quieras que estés.

Si necesitas perdonar a otros, empieza por perdonarte a ti mismo. La vida es muy simple. Recibimos lo que hemos dado. Somos responsables de todas las experiencias de nuestra maravillosa vida, de las experiencias buenas y de las malas. Todos los pensamientos que tenemos van creando nuestro futuro, cada uno va creando su propia experiencia con las cosas que piensa y que dice.

Cada vez que decidas no perdonar , recuerda que el resentimiento es como tragar una cucharadita de veneno diaria, se va acumulando y nos daña. Lo que tenemos que aprender es, entender que "TODO EL MUNDO" hace lo mejor que es capaz de hacer en cada momento. Con el entendimiento, la consciencia y el conocimiento que tiene, cada uno llega hasta donde puede. Generalmente, cuando uno maltrata a alguien, ha sido maltratado de niño. Cuanto mayor es la violencia, mayor es el dolor íntimo que guarda en su interior. Esto no significa que estemos justificando las malas actitudes para con los demás, sin embargo para nuestro crecimiento espìritual, debemos "comprender" que esas personas sufren.

Deja de pensar en lo que te ha sucedido en el pasado con alguien. Libera esa imágen de tu mente, dejandola ir, te liberas tú y liberas de rencor a los demás. El pasado no tiene que tener poder sobre nosotros. No promuevas la bronca, el rencor, porque todo lo que enviamos al mundo, regresa a nosotros inevitablemente.

Cuando te ames a ti mismo lo suficiente como para poder elevarte por encima de la situación que te generó dolor, entonces la comprensión y el perdón te resultarán fáciles.

Debemos liberarnos de las preocupaciones cotidianas, de ciertas creencias negativas sobre nosotros mismos y de otras personas. La liberación tiene que ver con el PERDÓN. Aprender a perdonarnos a nosotros por posibles equivocaciones, y fundamentalmente, poder perdonar a los demás. 

Cuando no sabemos perdonar, sentimos una carga pesada sobre nuestra espalda, muy difícil de llevar. Para vibrar mas alto  tenemos que liberarnos de este pesado equipaje mental y emocional que cargamos cotidianamente.   Me refiero a sentimientos como la culpa, la envidia, el resentimiento, el dolor, necesidad de dominio, depresión, apatía, celos, etc. 

La liberación es una limpieza espiritual.

EL APEGO

EL APEGO



Un pájaro herido no puede volar, pero un pájaro que se apega a una rama de árbol, tampoco.

¡Deja de apegarte al pasado!

Dice el proverbio hindú:

"El agua se purifica fluyendo; el hombre, avanzando." El mundo está lleno de sufrimiento; la raíz del sufrimiento es el apego; la supresión del sufrimiento significa la eliminación, el abandono de los apegos.

Hay un deseo común, que es el cumplimiento de lo que se cree que va a dar felicidad al yo, al ego. Ese deseo es apego, porque ponemos en él la seguridad, la certeza de la felicidad. Es el miedo el que nos hace desear la felicidad, y ella no se deja agarrar. Ella es. Esto sólo lo descubrimos observando, bien despiertos, viendo cuándo nos mueven los miedos y cuándo nuestras motivaciones son reales.

Si nos aferramos a los deseos, es señal de que hay apego.

¿Abandonar los apegos significa apartarse del mundo material? La respuesta es: ¡No!

Uno usa el mundo material, uno goza el mundo material, pero no debe hacer depender su felicidad del mundo material.

¿Está esto suficientemente claro?

Uno comienza a gozar las cosas cuando está desapegado, porque el apego produce ansiedad. Si estás ansioso cuanto te aferras a algo, difícilmente podrás gozarlo. Por lo tanto, lo que te propongo no es una renuncia al goce: es una renuncia a la posesividad, a la ansiedad, a la tensión, a la depresión frente a la pérdida de algo.

¿De dónde crees que provienen todos los conflictos?

De los apegos.

¿De dónde crees que proviene el sufrimiento?


De los apegos.

¿De dónde crees que proviene la soledad?

De los apegos.

¿De dónde crees que proviene el vacío?

Tú lo sabes: el origen es el mismo.

¿De dónde crees que provienen los temores?

También de los apegos. Sin apego no hay temor. ¿Lo pensaste alguna vez?

Sin apego no hay temor.

Anthony de Mello


ENFÓCATE EN TU "YO SI PUEDO"

Siempre puedes. Es posible que no puedas hacer lo que quieres en el momento que lo estás deseando. Pero siempre puedes hacer algo.
Si bien puede que no tengamos la capacidad de cambiar rápidamente en dónde nos encontramos, siempre podemos modificar nuestra dirección. Es sencillo: nuestra dirección es determinada, en primera instancia, por nuestros pensamientos. Lo que pensamos precede a las acciones y éstas a los resultados. Cambia tus pensamientos y poco a poco comenzarás a obtener nuevos resultados. Y esto es algo que siempre podemos hacer: elegir nuevos pensamientos. Con este solo y simple hecho, tienes el poder para iniciar el cambio que quieres ver en tu vida.”
Si no puedes hacer grandes cambios en este momento, ¿qué pequeñas transformaciones sí están en tu poder?.
Variaciones que te permitan ir variando el rumbo para apuntar hacia el destino deseado.
Dirigir tu vida hacia la visión que en el fondo deseas puede requerir gran energía. Pero al igual que mover todo un buque de cientos de toneladas, todo comienza por un pequeño cambio.
No te concentres en tus “yo no puedo”.
Todos los tenemos.
Sin embargo, es en nuestros “yo puedo”, por pequeños que sean, en donde está nuestro poder de redirigir nuestra vida.”
Recuerda: tu enfoque determina tu nivel de energía.
¿En qué te enfocas usualmente? ¿En lo que no puedes o en lo que sí puedes? Conéctate con tus “yo puedo” y estarás alimentando tu energía.

martes, 20 de enero de 2015

MERCADO ESPIRITUAL

Hoy en día se ofrece en el “Mercado-Espiritual”, cursos, técnicas, cantos y ritos que aseguran que a través de ellos, ustedes llegarán a la abertura del canal-espiritual y podrán comunicarse con otras realidades de existencia. Las personas crédulas e ingenuas pagan por esos cursos, pensando que llegarán a la iluminación. Muchos con pena comprueban, que por más que practican una y otra vez lo aprendido, no llegan nunca a activar la Glándula Pineal y jamás se comunican con su espíritu. 

¿Por qué se estarán preguntando y diciendo si estamos realizando todo lo que nos enseñaron, paso por paso, por qué no estamos logrando la abertura y por qué las realidades superiores no se comunican con nosotros? - ¿Qué de errado estamos haciendo?...

EL SER UNO responde Pueden hacer todas las técnicas que quieran, pueden asistir a todos los cursos del mundo, pueden tener todo el conocimiento del planeta, pero si todo eso no lo acompañan con una vida auténtica de trabajo interior de limpieza, donde el alma necesita despojarse de los lastres que arrastra de vida tras vida, por falta de entendimiento, por emociones negativas-enfermas, por actos, acciones y pensamientos incorrectos… jamás llegarán a la meta que se han impuesto. 

Podrán tener el aparato telefónico, la línea para usarlo, pero si el número es incorrecto, no podrán activar la comunicación y el contacto. El aparato es el cuerpo físico, la línea es el cerebro psíquico y el número es tu mente espíritu. Saber y averiguar el número correcto, les demandará un trabajo arduo y profundo, solo así podrán conseguirlo y lo podrán obtener, cuando estén listos y prontos, porque serán “Ellos” que se comuniquen con ustedes y no ustedes con ellos.

El universo no funciona a la manera y forma que ustedes están acostumbrados en el planeta Tierra. Ustedes todo lo consiguen a través de: Contactos, relaciones, recomendaciones, amistades, simpatías, parentesco, necesidades y más. El universo es muy diferente, este funciona siempre por “Merecimiento” y esta cualidad la tienen que ganar cada uno de ustedes en el transcurso de sus vidas, puesto que lo deben conquistar con: la voluntad, constancia, esfuerzo, labor, creencia, firmeza y paciencia, en el trabajo interior y espiritual. 

No desistan Hermanos, es un trabajo dedicado pero no es imposible” y si lo consiguen no solo se comunicarán con otras realidades elevadas, también podrán viajar y trasladarse por el universo entero.
Nada ni nadie les impedirá a lo que tienen derecho: EL UNIVERSO… tangible e intangible".

Extractado:  EL SER UNO V Los Interanos La Ciudad de Cristal.

lunes, 19 de enero de 2015

LA AUTOESTIMA

 La autoestima es ese conjunto de pensamientos y sentimientos que tenemos acerca de nosotros mismos. Es la confianza y el respeto que tenemos hacia nuestra propia persona. Al desarrollar la autoestima, aumentará nuestra capacidad de ser felices y veremos la vida con más optimismo. La mayoría de las ideas respecto a nosotros mismos las hemos aprendido de los demás, pero en realidad, solo tú tienes el derecho a construirte la visión de ti mismo.
 La autoestima es la clave para comprendernos y comprender a los demás, y la clave del éxito o el fracaso, porque aunque no lo parezca, la manera en que nos vemos a nosotros mismos, influye en todas nuestras experiencias. Las respuestas de nuestras experiencias dependerán siempre de quién y qué pensamos que somos. Teniendo una alta autoestima comprenderemos y superaremos mejor las situaciones en la vida, nos sentiremos capaces de todo, valiosos. Y por otro lado, teniendo una baja autoestima nos sentiremos inseguros e inútiles y actuaremos casi siempre de manera equivocada.
  Todos somos capaces de desarrollar una alta autoestima y a todos nos interesa. Cuanto más alta sea, más creativos seremos, más alegría experimentaremos en nuestra vida, no nos sentiremos asustados ni extraños en este mundo, nos sentiremos felices de vivir en nuestros cuerpos, etc. La verdadera naturaleza de la autoestima no es competitiva ni comparativa, es solo una mente que confía en sí misma, por lo tanto, nadie puede generar esta experiencia salvo uno mismo. Cultivándola día a día, responderemos de manera activa y positiva a las oportunidades que se nos presenten.
 Debemos tener claro que la soberbia, la prepotencia o la arrogancia, entre otros, no son síntomas de tener una alta autoestima. La verdadera autoestima no se expresa por el afán de ser superior a los otros o de rebajarlos para sentirte tú mejor, no está en guerra ni consigo misma ni con los demás.

Tener una sana autoestima es creer que nadie es más que nadie, es creer que tú, como ser humano, eres tan valioso como cualquier otro. Mantener una sana autoestima solo está en nuestras manos, cambiando nuestra manera de pensar y de sentir respecto a nosotros mismos.
La. Autoestima es amor propio, es aceptarse como se es, estar seguro de si mismo al reconocer y aceptar todo el ambiente a tu alrededor.

CONÓCETE Y ACEPTATE

  Una necesidad o un objetivo de cualquier persona es conocerse y aceptarse uno mismo. Para ello es preciso mirar hacia dentro con realismo, calma y sin miedo. El saber quién es y cómo es uno facilita el camino y lo hace más gratificante. Para sentirnos bien es importantísimo conocer nuestra forma de ser y de actuar, también nuestros puntos positivos como los negativos y estar motivados para aumentar ese conocimiento, pero no de manera obsesiva.
 Es muy importante quererse uno mismo, lo has escuchado muchas veces y lo sabemos desde la infancia pero… ¿de verdad lo haces?, ¿de verdad te aceptas a ti mismo o te preocupas más por complacer y agradar a los demás?, ¿tienes claros tus gustos, tus preferencias, tus principios…? 
Se escucha demasiado que debemos tener éxito, ser un buen ingeniero, un buen arquitecto, un buen lo que sea para ganar mucho dinero. Se vive entonces con la presión excesiva de ser más y mejor que los demás, destacar sobre los otros. Sacar las mejores notas, tener las mejores cosas. Al final, lo que a uno le hace infeliz es darse cuenta de haberse olvidado de quién es en realidad. Y entonces, empieza a surgir esa rabia y resentimiento por no haber podido ser quien eres en realidad.
 Pero eso puede cambiar desde este momento, en el momento en el que uno se plantea ser exactamente quien uno es, ni más ni menos, y sentirse muy orgulloso de la persona que es, porque si hay algo que mejorar se mejora. Recuerda que no se puede cambiar nada que antes no ha sido aceptado.
Todos somos diferentes, todos somos especiales. Cada uno tiene su forma de ser y de entender las cosas, esto viene condicionado por el desarrollo de tu vida desde el día en que naces; infancia, adolescencia, familia, gente que va formando parte de tu vida, incluso gente con la que solo coincides una vez, todo esto y muchas cosas más crearán tu personalidad. 
Hay tanta variedad de personalidades como personas existen en el mundo, puedes tener características similares pero nunca serás igual a otra. El empeño de algunas personas por imitar a otras no es nada bueno, para ser feliz y aceptarte debes ser tú mismo, ser natural, sentirte bien con lo que hagas, no dejarte llevar por la manipulación de la gente, los medios, etc.
Generalmente hay dos tipos de personalidad, aunque como ya hemos dicho la variedad es infinita (tantas como personas).
  - Personalidad fuerte; son aquellas personas que tienen muy claros sus preferencias, sus principios, sus objetivos en la vida, estas personas son difíciles de manipular porque saben lo que quieren. Estas personas pueden con casi todo.

  - Personalidad débil; son aquellas personas que no se paran a reflexionar sobre lo que de verdad les gusta, cambian continuamente de ideas, de principios y son fácilmente manipulables, no tienen claro lo que quieren y se dejan llevar, su único fin es gustar a todo el mundo, y esto, aparte de estúpido es imposible.

 Puede ser mejor que la base de tu personalidad sea fuerte, pero aunque en muchas ocasiones no sea así no por eso eres peor persona, es simplemente que tus vivencias han influido de esa forma. Crea tu base e incluso si tu personalidad es fuerte recuerda que seguirás cambiando durante toda la vida, y que siempre puedes mejorar y aprender cosas de los demás.
Desecha las cosas malas, la envidia, el egoísmo, el egocentrismo, no te dejes llevar por criticas destructivas que provienen de  personas manipuladoras, negativas y vacías, te sentirás mejor contigo mismo si haces las cosas correctamente y si tratas bien a los demás, sigue aprendiendo de las experiencias de tu vida, todo lo bueno y lo malo que pasa en ella tiene algún motivo aunque no lo puedas entender, quédate con lo mejor de cada una.

 Una buena actitud ante tu pasado es aceptarlo plenamente. Si no tienes una plena aceptación de tu pasado vivirás el presente con malestar y te llevará a frustrarte, deprimirte, hundirte, o simplemente a estar de mal humor y con unos estados de ánimo difíciles de controlar; por lo que es esencial ‘pasar página’. Recuerda que cuando nos aceptamos tal y como somos todas las pautas negativas se disuelven y todo nos empieza a ir mejor. Ninguna pauta negativa nos puede afectar si nos aceptamos. Conócete, escúchate, y si algo no te gusta cámbialo, solo tú puedes hacerlo pero sobre todo quiérete y acéptate, serás una persona más positiva y la gente querrá estar a tu lado.

sábado, 17 de enero de 2015

ESTRATEGIAS DEL EGO PARA LLAMAR LA ATENCIÓN.

"Estrategias del Ego Para Llamar la Atención". Eckhart Tolle.



Cada vez que renunciamos a uno de esos patrones, 
restamos peso a lo que somos en el nivel de la forma 
y nuestro verdadero ser se manifiesta más plenamente. 
Nos empequeñecemos para engrandecernos.


A continuación aparecen algunas de las formas como las personas tratan 
de enfatizar su identidad con la forma, aunque inconscientemente. 
Si nos mantenemos en estado de alerta,
 podremos detectar algunos de esos patrones inconscientes en nosotros mismos:

- Exigir reconocimiento por algo que hicimos 
y molestarnos o enojarnos al no recibirlo.
 
- Tratar de llamar la atención hablando de nuestros problemas 
o de nuestra enfermedad.

- Haciendo una escena.
 
- Dar una opinión cuando nadie la ha pedido 
y no contribuye en lo absoluto a la situación.

- Preocuparnos más por la opinión que el otro tenga de nosotros, 
que por la otra persona, es decir, utilizar a los demás 
para reflejar nuestro ego o fortalecerlo.
 
- Tratar de impresionar a los demás con nuestras posesiones, conocimiento, 
aspecto físico, posición social, fortaleza física, etcétera.

- Reforzar momentáneamente al ego a través de una reacción airada
 contra algo o alguien.

- Tomarnos las cosas a pecho, sentirnos ofendidos. 

- Reafirmar que tenemos la razón y que los otros están equivocados
 a través de quejas mentales o verbales inútiles. 

- Mostrarnos importantes o aparentar que lo somos.

Una vez detectado ese patrón interior, conviene hacer un experimento. 
Averigüe cómo se siente y qué sucede cuando renuncie a ese patrón. 
Sencillamente abandónelo y vea qué sucede.
Otra manera de generar conciencia es restarle peso a lo que somos en el nivel de la forma. 
Descubra el poder enorme que fluye desde su interior
para proyectarse sobre el mundo una vez que logre restarle peso 
a su identidad con la forma.

Cuando estamos quedos, somos lo que somos más allá
de nuestra existencia temporal: 
conciencia informe, eterna.

Eckhart Tolle.
Una Nueva Tierra. 

DESIDERATA

Desiderata
Desiderata es un poema muy conocido sobre la búsqueda de la felicidad en la vida.  Sus derechos de autor se remontan a 1927 y pertenecen a Max Ehrmann, abogado y poeta de Indiana, Estados Unidos.
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Camina placido entre el ruido y la prisa; y piensa en la paz
Que se puede encontrar en el silencio.

En cuanto sea posible y sin rendirte, manten buenas relaciones Con todas las personas.

Enuncia tu verdad en una manera serena y clara;
Y escucha a los demas, incluso al torpe e ignorante,
Tambien ellos tienen su propia historia.

Esquiva a las personas ruidosas y agresivas,
Pues son un fastidio para el espiritu.

Si te comparas con los demas te volveras vano y amargado;
Pues siempre habran personas mas grandes y mas pequenas que tu.

Disfruta de tus exitos lo mismo que de tus planes;
Manten el interes en tu propia carrera, por humilde que sea;
Ella es un verdadero tesoro en el cambiar de los tiempos.
Se cauto en tus negocios, pues el mundo esta lleno de engaños;  Mas no dejes que esto te vuelva ciego para la virtud que existe;

Hay muchas persona que se esfuerzan por alcanzar nobles ideales; La vida esta llena de heroismo.

Se sincero contigo mismo, en especial no finjas el afecto,
Y no seas cinico en el amor, pues en medio de todas las arideces Y desengaños es perenne como la hierba;

Acata docilmente el consejo de los años,
Abandonando con donaire las cosas de la juventud.

Cultiva la firmeza de el espiritu para que te proteja
En las adversidades repentinas.
Muchos temores nacen de la fatiga y la soledad.

Sobre una sana disciplina, se benigno contigo mismo.
Tu eres una criatura del universo;
No menos que las plantas y las estrellas,
Tienes derecho a existir, y sea que te resulte claro o no,
Indudablemente el universo marcha como debiera.
Por eso debes estar en paz con dios, cualquier que sea tu idea de el;

Y sean cualquiera tus trabajos y aspiraciones
Conserva la paz con tu alma; en la bullisiosa confusion de la vida.

Aun con toda su farsa, penalidades y sueños fallidos

El mundo es todavia hermoso; se cauto, esfuerzate por ser feliz.

LA ENVIDIA

Los seres humanos hemos sido educados para comparar y programados para comparar, para comparar siempre; la envidia es comparación. No paras de compararte con todo aquel que pase por tu lado y el resultado será una gran envidia.

Toda tu vida te estás comparando, si por el contrario, dejas de comparar, la envidia desaparece. Lo único que sabes es que tú eres tú y que no eres nadie más.

La comparación es una actitud muy ridícula puesto que cada persona es única e incomparable, una vez que asimiles y te convenzas de esta afirmación, la envidia desaparecerá y así evitarás que dentro de ti se genere algún tipo de patología que pueda afectarte a corto plazo. Recuerda que el origen de la mayoría de las enfermedades es mental.


Cada cual es único e incomparable. Solo eres tú mismo: no ha habido ni habrá nadie como tú, ni tienes porqué parecerte a nadie.

viernes, 16 de enero de 2015

LEY DEL DAR Y RECIBIR

LA LEY DEL DAR Y RECIBIR

El universo opera mediante un flujo dinámico. Dar y Recibir son aspectos diferentes del flujo de la energía en el universo. Si estamos dispuestos a dar aquello que buscamos, mantendremos la abundancia en el universo circulando por nuestras vidas. La ley espiritual del éxito es la Ley del Dar. También podría llamarse la Ley del Dar y Recibir, porque el universo opera por medio de un intercambio dinámico; nada estático.
Nuestro cuerpo está en un constante estado dinámico con el cuerpo del universo, nuestra mente mantiene una interacción dinámica con la mente del cosmos. El flujo de la vida no es otra cosa que la interacción armoniosa de todos los elementos y las fuerzas que estructuran el campo de la existencia. Esta interacción de las fuerzas y los elementos de la vida opera a través de la Ley del Dar. Puesto que nuestro cuerpo, nuestra mente y el universo mantienen un constante y dinámico intercambio, frenar la circulación de la energía es como frenar el flujo sanguíneo. Cuando la sangre deja de circular comienza a coagularse y estancarse.
Por eso debemos dar y recibir a efecto de mantener la afluencia y la riqueza, o cualquier otra cosa que deseemos en la vida, circulando permanentemente. La palabra afluencia viene de la raíz affluere, que significa fluir hacia. La palabra afluencia significa fluir en abundancia. El dinero es un símbolo de la energía vital que intercambiamos y de la energía vital que utilizamos como consecuencia del servicio que le prestamos al universo. Al dinero también se le llama moneda corriente, nombre que refleja igualmente la naturaleza fluida de la energía. La palabra corriente viene del latín cúrrere que significa correr o fluir. Por tanto si impedimos la circulación del dinero y nuestra única intención es acaparar el dinero y aferrarnos a él, impediremos también, puesto que el dinero es energía vital, que éste vuelva a circular en nuestra vida. Para que esa energía fluya constantemente hacia nosotros debemos mantenerla constantemente en circulación. Al igual que un rio el dinero debe mantenerse en movimiento o de lo contrario comienza a estancarse, a obstruir a sofocar y a estrangular su propia fuerza vital; la circulación lo mantiene vivo y vital.
Toda relación es una relación de dar y recibir. El dar engendra el recibir y el recibir engendra el dar. Lo que sube debe bajar y lo que se va debe volver. En realidad recibir no es lo mismo que dar porque dar y recibir son aspectos diferentes del flujo de la energía en el universo, aunque muy complementarios; si detenemos el flujo de alguno de los dos obstaculizamos el flujo de la inteligencia de la naturaleza. En toda semilla esta la promesa de miles de bosques pero la semilla no debe de ser acaparada; ella debe dar su inteligencia al suelo fértil, a través de su acción de dar su energía invisible fluye para convertirse en una manifestación material. Cuanto más demos más recibiremos porque mantendremos la abundancia del universo circulando en nuestra vida. En realidad todo lo que tiene valor en la vida se multiplica únicamente cuando es dado. Lo que no se multiplique a través del dar, ni vale la pena darlo, ni vale la pena recibirlo.
Si al dar sentimos que hemos perdido algo, entonces el regalo no ha sido dado en realidad y no generará abundancia. Cuando damos a regañadientes, no hay energía positiva detrás de nuestra acción de dar. En el dar y recibir lo más importante es la intención, la intención debe de ser crear felicidad para quien da y para quien recibe, porque la felicidad sustenta y sostiene la vida, y por tanto, genera abundancia. La retribución es directamente proporcional a lo que se da, cuando el acto es incondicional y sale del corazón. Por eso el acto de dar debe ser alegre; la actitud mental debe ser tal que se sienta en el acto la alegría de dar. De esa manera la energía que hay en el acto de dar aumenta muchas veces más. En realidad practicar la ley del dar es muy sencillo: si.
Escrito por Deepak Chopra

jueves, 15 de enero de 2015

CUAL ES TU CAMINO EN LA VIDA?

Cuál es tu camino en la vida? Seguir siempre tus sentimientos, escuchar a los sentimientos de tu alma y lanzarte a vivir las aventuras que tu alma te impulse a experimentar. Tu alma, si la escuchas, te dirá lo que necesitas experimentar. Si te sientes aburrido o no tienes deseo de hacer algo, ello significa que ya lo has experimentado, que has adquirido la sabiduría de esa aventura. Pero si quieres hacer algo, esa urgencia dentro de tu alma significa que debes vivir la experiencia y su virtud. Si te abstienes de ella, sólo estás posponiendo la experiencia hasta otro momento y otra existencia.

Vive la verdad de lo que sientas dentro y ama a quien está sintiéndolo. Entiende que el sentimiento debe ser expresado y satisfecho. Cuando quieras hacer algo, sin importar lo que sea, no es sabio ir en contra de ese sentimiento, pues hay una experiencia esperándote y una gran aventura que hará tu vida más dulce. Si escuchas a tus sentimientos, siempre estarás haciendo lo más apropiado para la evolución de tu hermoso ser hacia la sabiduría profunda. Es cuando vas en contra de tus sentimientos cuando sufres la enfermedad, la neurosis y la desesperación.

Sigue a tu corazón, a tus sueños, a tus deseos. Haz lo que tu alma te pida que hagas, no importa lo que sea, y hazlo hasta el final; entonces continuarás con otra aventura. Nunca serás juzgado a menos que aceptes los juicios de aquellos a tu alrededor. Y si aceptas su juicio, es únicamente tu voluntad hacer eso por la experiencia.
Llegará un momento, en esta vida o en las próximas, en el que habrás alcanzado ese punto donde ya no tienes el deseo de hacer esto o aquello, sino simplemente «ser». Nunca más maldecirás o juzgarás a la prostituta, al ladrón, al asesino o al país que está en guerra. Habrás vivido todas esas cosas y sabrás lo que se siente al serlas. Estarás tan completo con las experiencias de este plano, que ya no habrá nada que te arrastre otra vez aquí para experimentar. Entonces partirás hacia nuevas aventuras en planos superiores de existencia.

Cuando contemples lo que te acabo de decir, percibirás y entenderás un valor en ti mismo que es la demostración intencional del Dios poderoso, el fuego y la vida que tú eres. También entenderás que cualquier dirección que tomes en la vida, ese va a ser el camino hacia tu iluminación. Y por cada aventura a lo largo del camino, obtendrás una percepción mayor del misterio que eres. Llegarás a amar lo que eres, a acariciarlo y a pulirlo, hasta que la luz de tu ser pueda competir con la gran Luz del firmamento y la paz de tu ser pueda competir con la medianoche, cuando todo está tranquilo en la Tierra. Nunca más te negarás a ti mismo. Nunca alterarás lo que eres, ni juzgarás lo que eres. Permitirás aquello que has de ser.


Eres una luz para el mundo. Sin embargo, no podrás convertirte en eso hasta que ames y abraces todo lo que has hecho y te des cuenta de que todo fue por el bien de tu vida, porque ello te ha transformado en la magnífica entidad que eres en este día.