Amadas y amados hermanos del planeta Tierra:
Yo Soy Maitreya.
Estamos unidos. Nuestras asignaciones no son aisladas y cada quien realiza su labor sin interferir en la labor de los demás. Todos estamos actuando en la misma dirección para lograr el mismo objetivo, cada uno usando su potencial, usando, digamos, su manera de hacer las cosas.
En este momento estamos preparando el planeta para el Gran Despertar; estamos acomodando las energías y asistiendo a todos los Seres de Luz que van a poder elevar la energía del planeta. En este gran momento, cada ser en la superficie del Planeta Tierra contribuirá con su energía para que el equilibrio se restablezca lo más rápido posible.
No podemos negar que van a ser tiempos difíciles, tiempos de gran turbulencia, aunque también de júbilo, y cada energía presente en este planeta, desde la de cada elemental hasta la de las estructuras cristalinas del planeta, estará involucrada en este proceso. Allí estaremos, constituyendo un gran halo de energía de Amor y Luz, y con nosotros estarán también todos los seres galácticos que ya están alrededor de vuestro planeta.
Las fuerzas que surgirán de las entrañas de Gaia, de los Cristales, de los elementales, de los elfos, de los gnomos, de las hadas, de las ondinas, de las salamandras y de los dragones, se aunarán para generar un gran campo energético de Amor y Luz en la superficie de la Tierra que, procedente del interior, se dirigirá al exterior del planeta. Será como si estuvieran pisando un terreno extremadamente brillante y positivo, y todos vosotros, sin excepción, seréis envueltos por toda esa capa de Luz y Amor que vendrá de arriba y de abajo.
Aquellas personas de corazón puro, que ya comprendan todo este proceso, recibirán esa energía y se serenarán de una manera que hasta podrías definir como «extraña», ya que la energía que hoy liberan hará que el proceso fluya a través de ellas, equilibrándolas más y mejor.
Aquellas que aún no estén despiertas, pero que tengan un corazón amoroso e iluminado, recibirán esa fuente de energía positiva y la asimilarán, aunque no alcancen a saber o a comprender cómo acoger todo este proceso de una manera sosegada, sin un clamor y sin mucho sufrimiento.
Las que tengan el corazón tocado por el miedo diario, quienes todavía se aferren a sus creencias limitantes y a todo cuanto les han enseñado, también recibirán esta carga positiva de Amor y Luz, pero no la absorberán, porque su corazón estará más centrado en todos esos condicionamientos. Entonces emanarán mucho miedo y ese miedo provocará una gran burbuja de energía de baja vibración que será lo suficientemente fuerte como para impedir que la Luz y el Amor, que vendrán de arriba y de abajo, alcancen su corazón.
A medida que se habitúen a la idea, dejen de temer y tomen conciencia de todo, ese miedo se disolverá y la Luz les invadirá también hasta que su corazón sea lo suficientemente puro para alcanzar una frecuencia de Luz específica.
Aquellos seres de corazón oscuro, no aceptarán nada, mas bien al contrario, crearán situaciones a fin de originar más desequilibrio en el planeta, alentando así a los que estén llenos de miedo para que emanen más miedo y, lamentablemente, esa será la gran mayoría de los habitantes del planeta.
Por lo tanto, la acción que tendríais que llevar a cabo vosotros es la de recibir esa ola de Luz y Amor y simplemente enviarla de regreso a vuestro alrededor, es decir, emanar del Amor. También podríais formar grupos y enviar vuestras energías al planeta, porque es muy importante que los que sois conscientes de todo esto podáis irradiar Luz y Amor al planeta, y no solo a Gaia, también a vuestros hermanos de la superficie. Para ello, tendréis que imaginar y visualizar como el Amor y el Equilibrio envuelven el planeta y a cada hermana y hermano, sin excepción. Esta es una muy buena actitud que contribuirá a que la Luz en la superficie aumente más y más, puesto que aquellos que tienen las armas para engendrar miedo se encontrarán tan envueltos en Amor y Luz, que sus voces no resonarán, sus ideas no se propagarán y sus acciones no se multiplicarán.
De manera que empezad a organizaros, a formar grupos que envíen Luz y Amor a todos los hermanos del planeta. Será fundamental, e incluso diría que será lo único que tendréis que hacer, ya sea en grupo o individualmente.
Manteneos al margen de toda discusión, de toda desesperación, de toda controversia; no respondáis a nada, porque no seréis escuchados. Solo emanad Amor y Luz. Envolved en Amor y Luz a los que no están despiertos para que no les alcance toda esa energía alimentada por aquellos de corazón oscuro, ya que los primeros ya están viviendo sus propios miedos, que no necesitan ser exacerbados.
¡Ese será tu papel! No trates de explicar nada, no quieras imponer ideas, no digas nada, porque del mismo modo que tú has aprendido mucho con el tiempo, cada uno de ellos aprenderá en su momento.
Actualmente, muchos todavía discuten ciertas cosas porque no las entienden. Entonces, ¿cómo quieres que aquellos que nunca han oído hablar de algo, en unos minutos o en unas horas, lo aprendan todo, lo acepten todo y estén de acuerdo con todo?
No intentes enseñar nada, porque el Gran Despertar abrirá la conciencia de todos y ya no permanecerán inertes como están hoy. La Luz intensa que vendrá hará que su mente se abra y muchas verdades se les mostrarán, aunque no se digan. Les hará pensar, no solo escuchar sin formarse una opinión.
Pero tú no estarás entre los que los enseñarán. Si te preguntan algo, simplemente di: «Aprende a tu propio ritmo. Abre tu corazón a la Luz y aprenderás a tu propio ritmo.» Ya sé que para muchos será difícil, porque a muchos les gusta imponer sus ideas y obligar a la gente a pensar como ellos. Yo os digo que hacer eso no sería conveniente ni para vosotros ni para el otro, porque no os entenderías y hasta podríais perjudicar su entendimiento más de lo que podríais ayudarlo.
Todo quedará expuesto para todos, y agrego que vosotros también aprenderéis mucho.
Hoy dices que estás despierto y que sabes muchas cosas, pero todavía no sabes casi nada, por eso todos aprenderán, incluyéndote a ti. Y a partir de ese aprendizaje, se dará la evolución de la Raza Terrestre. Tras lo dicho, cada uno podrá elegir el camino a seguir: ser la paja o el trigo, no se impondrá nada.
Así que no impongas ideas a nadie. ¿Qué pasaría si alguien a quien amas se volviera hacia ti y te dijera: «Yo no creo en nada de esto, quiero seguir mi camino»? Tú podrás sufrir, pero esa habrá sido su elección, la elección de su alma. No intentes cambiarlo, pide asistencia para que podamos aliviar tu sufrimiento, pero no hagas nada, porque tú no estás destinado a cambiar a un alma. Cada alma piensa como quiere, por lo tanto la conciencia humana representa al alma.
De modo que prepárate para aprender, piensa, por ejemplo, cómo vas a emanar Luz y Amor a todos los hermanos del planeta. Si quieres empezar hoy, empieza, eso estará bien, porque ya estarás creando un gran egrégor de Luz y Amor en la superficie del planeta. Por lo tanto, plantéate hacer eso en el momento adecuado junto con todos aquellos que puedan enviar Amor y Luz en ese momento. ¿Y cómo vas a hacerlo? No hay regla, no hay meditación, no hay receta. Todo el mundo lo hará con el corazón.
Aquellos que emanan energía, emanarán energía; aquellos que no emanan energía, siguiendo alguna técnica, emanarán su propio Amor y Luz. Visualiza a tus hermanos envueltos en Amor y en Luz. Aquellos entre vosotros que tienen dificultad a la hora de visualizar, pensad en el planeta y rodeadlo con un gran halo de Luz. Eso servirá. Envuelve el planeta en Luz durante el tiempo que quieras: 1 minuto, 5 minutos, 10 minutos, lo que sea. Lo que importa es la intensidad de lo que haces. Cinco minutos cada hora no es mucho para ti, sin embargo sí es mucho para el planeta. Habitúate a ello. Hazlo siempre durante el transcurso de una completa para que todos coincidáis en hacerlo a la misma hora. No importa si el horario es diferente en otro lugar, se trata de una hora completa. Respirad profundamente, envolved de Luz el planeta y enviad todo vuestro Amor y buenos deseos a todos vuestros hermanos sin excepción. No hagáis excepciones porque entonces no emanaréis Amor; sois todos los que tenéis que recibirlo.
Si cada uno de vosotros realizase esta acción, calculad cuántos podrían repetirla en todo el planeta, ¡y cuán grande sería la capa de Luz que entre todos crearíais! Tú puedes empezar hoy. Sí, cada uno a su hora, cada uno en su lugar, cada uno a su manera. Si queréis organizaros en grupos y crear procesos, está bien. Lo importante es que actuéis para ayudar a estos hermanos que necesitan Luz y Amor.
Todo está cada vez más cerca, así que prepárate; no esperes a que suceda para iniciar este proceso. Comienza hoy mismo, en cualquier momento, cada uno cuando pueda. No tienes que hacerlo las veinticuatro horas del día, pero cada vez que te acuerdes, durante el transcurso de una hora completa, detente cinco minutos y envía tu energía, envía tu amor a tus hermanos del planeta.
Repito que no es solo por Gaia, es por vuestros hermanos. Estamos hablando de mentes humanas, cuerpos humanos, almas humanas. Esas Almas necesitan mucho Amor y Luz a su alrededor para poder absorber el proceso de la forma más simple y fácil posible. Nosotros ya lo estamos haciendo y no cada hora, lo estamos haciendo todo el tiempo. No vuestro tiempo, sino nuestro tiempo, que es el “aquí y ahora”, y en este “aquí y ahora” todos envolvemos vuestro planeta de Luz y Amor y cada Ser Humano recibe esa energía.
¿Quieres colaborar? ¡Que cada uno de vosotros haga su parte!
Muy amorosamente,
MAITREYA
Canalizado por Vania Rodrigues
Fuente: Isis Alada
No hay comentarios.:
Publicar un comentario