A LOS TRABAJADORES DE LA LUZ.

Como Trabajador de la Luz, su presencia es esencial en el panorama actual de energías y vibraciones conflictivas. Su papel Divino trasciende las acciones individuales. Es un compromiso de encarnar e irradiar luz en un mundo que es muy pesado y oscuro.

Al permanecer conectado con tu luz y verdad interior, no solo te elevas a ti mismo, sino que también actúas como un faro de esperanza y positividad para los demás. Tus acciones, palabras y pensamientos tienen el potencial de crear ondas de transformación que se extienden mucho más allá de lo que puedes percibir.

Acepta tu responsabilidad con gracia, sabiendo que cada pequeño acto de bondad, cada palabra de aliento y cada momento de paz interior contribuyen al conjunto colectivo. Estás contribuyendo a la sanación y evolución de la humanidad y del planeta. Confía en el poder de tu luz, pues es una fuerza que puede iluminar hasta los rincones más oscuros y guiar a los demás hacia una existencia más brillante y armoniosa.

Asumir tu papel como faro de Luz en medio de la oscuridad es una profunda responsabilidad. Tu capacidad para transmutar las energías negativas a través de tu conexión con la Luz divina que hay en tu interior es una herramienta poderosa frente a la adversidad. Al irradiar tu Luz hacia el exterior, creas un escudo de protección no solo para ti, sino para todos los seres que lo necesitan.

A medida que viajas a través de las energías conflictivas que te rodean, es crucial que reconozcas y aceptes tu papel como vehículo del amor divino y la sanación. Tu presencia en la Tierra en este preciso momento no es una mera coincidencia, es una manifestación de tu Propósito Divino. Ten fe en el inmenso poder de tu Luz interior para iluminar tu camino incluso en medio de los momentos más oscuros de la vida.

 Porque eres un valiente guerrero de la Luz, destinado a ser un catalizador para la transformación positiva. Como Verdadero Trabajador de la Luz, este es tu Propósito Divino.

Acepta la profunda responsabilidad de ser un conducto para la paz y la armonía, sirviendo como ancla para que las frecuencias del amor y la compasión impregna  la conciencia colectiva.

Cada pensamiento, palabra y acción que realizas envía ondas de energía que contribuyen a una ola de sanación y metamorfosis que se extiende por todo el planeta. Mantente firme en tu autenticidad, reconociendo que desempeñas un papel importante en el gran diseño del Plan Divino. Al elegir irradiar tu Luz con intensidad, ofreces un faro de esperanza y serenidad a todos los seres.

Este es un llamado a todos los Trabajadores de la Luz. Es hora de estar a la altura de las circunstancias. El Poder que tienen en su interior está más allá de su imaginación. Confíen en su Propósito Divino.

Te amamos y te honramos.

Somos el Alto Consejo de Sirio.